Rosa María Vargas
Historiadora y curadora independiente
Durante este último año que vengo recorriendo galerías de
arte en Lima, he notado que, lamentablemente, existen galeristas cuyos
criterios de selección se basan en la escuela de arte de procedencia, los
apellidos y a “cierta elite” a la que pertenece el artista (porque creen que
así la gente de su entorno va a adquirir las obras que expongan).
Afortunadamente, existen algunas excepciones y galeristas cuyo criterio amplio,
basado en la habilidad del artista, sin
importar condición social o escuela de procedencia habla muy bien de Ellos y como ejemplo tenemos a la galería “Enlace”,
que dirige de forma profesional y acertada el Sr. Roberto Ascóniga junto a su equipo, el cual lo integra la
también curadora Silvana Vargas–Machuca Barrantes a quienes les hago partícipes de mi respeto y admiración por apoyar el
talento peruano y realizar muestras de buen nivel tanto en su galería como
fuera de la misma. Justamente el día 17 de octubre acudí a la inauguración de
la muestra de un destacado artista del
medio: Carlos Bardales.
Carlos Bardales (Lima, 1971), artista plástico egresado de la Escuela Nacional Superior Autónoma de Bellas Artes de Lima, con estudios en talleres de Arte y de análisis tanto en Ámsterdam (Holanda) como en Madrid (España). Actualmente radica en Cuzco y desde allí viene desarrollando su arte y en esta oportunidad regresa a Lima para sorprendernos con una interesante propuesta con su muestra “La morada del rayo y el Amaru”.
Claramente puedo apreciar que “La morada del Rayo y el
Amaru”, va más allá de la fuerza misma de la naturaleza, que eleva y la enmarca
a un nivel espiritual, tomando como
inspiración la cosmovisión del hombre a través del tiempo y del espacio. Formas
y dibujos precolombinos y elementos del
arte virreinal también forman parte importante en esta muestra por la
originalidad con la que Bardales ha ejecutado durante el proceso creativo de
sus obras: El tallado en madera laminada en pan de oro, bronce, plata y
aplicaciones de piedras naturales las fusiona en una armonía perfecta entre la
naturaleza y el misticismo religioso, que
se aprecia recurrentemente en su
obra, al igual que el color Azul (color de Paz y al mismo tiempo de
melancolía), y es evidente la presencia
de símbolos o códigos procedentes de
algunos credos del orbe como el
judaísmo y el cristianismo.
Así mismo, sus lienzos ,en los que predomina la técnica mixta, poseen una iridiscencia y reflejos tales, debido a los tonos metálicos, obtenidos (supongo ) base de láminas de pan de oro, bronce y plata incorporadas a los lienzos (que según afirman algunos restauradores, dicha técnica con “pan de oro” se empleaba en el arte virreinal de la escuela cuzqueña y se le conocía como la técnica del “estofado”) Lo cual contribuye a resaltar aún más su trabajo, sumado a las texturas empleadas aplicando generosos empastes y pinceladas suaves para definir y reproducir la belleza etérea de los rostros y cuerpos de sus arcángeles, querubines y madonnas o vírgenes (quienes son algunos de los protagonistas de su obra), obteniendo así una producción artística de buen nivel, técnica y sobre todo de un exhaustivo trabajo de investigación para conceptualizar de manera notable su nueva propuesta.
Así mismo, sus lienzos ,en los que predomina la técnica mixta, poseen una iridiscencia y reflejos tales, debido a los tonos metálicos, obtenidos (supongo ) base de láminas de pan de oro, bronce y plata incorporadas a los lienzos (que según afirman algunos restauradores, dicha técnica con “pan de oro” se empleaba en el arte virreinal de la escuela cuzqueña y se le conocía como la técnica del “estofado”) Lo cual contribuye a resaltar aún más su trabajo, sumado a las texturas empleadas aplicando generosos empastes y pinceladas suaves para definir y reproducir la belleza etérea de los rostros y cuerpos de sus arcángeles, querubines y madonnas o vírgenes (quienes son algunos de los protagonistas de su obra), obteniendo así una producción artística de buen nivel, técnica y sobre todo de un exhaustivo trabajo de investigación para conceptualizar de manera notable su nueva propuesta.
Nota: La muestra estuvo abierta al público en la Galería “
Enlace”, Avenida Pardo y Aliaga 676, San Isidro, Lima – Perú, y fue
visitada hasta el 10 de noviembre, de lunes a sábado de 11.00 am a 8:00 pm .
http://rosamariavargashistoriadoradelarte.blogspot.com/2012/10/mi-apreciacion-de-la-muestra-la-morada.htmlUna acotación sobre el mismo tema
El miércoles (17.09.2012) en la noche
se inauguró la muestra “La morada del Rayo y el Amaru” de Carlos Bardales en la
Galería Enlace. Hacía meses que no me asomaba a esta galería ubicada en Pardo y
Aliaga; el año pasado creo que iba una vez al mes y este año simplemente dejé
de ir. Fue un descuido de mi parte, sin duda, porque había olvidado lo animadas
que podían ser las noches sanisidrinas (¿quién dijo que las barranquinas eran
las únicas buenas?).
Con influencias de la
escuela cusqueña y el arte colonial, pero sobre todo con una interesante
asimilación de corrientes contemporáneas, el arte de Bardales fluye ante
nuestros ojos con un atractivo único y sugerente. Al trabajar con pan de oro o
láminas de plata, estos cuadros de gran formato son como inmensas joyas que transmiten
un mensaje estético a medio camino entre el clasicismo y el postmodernismo.
Ciertamente, quedé encantado con la muestra.
En el transcurso de la
noche me encontré con varios amigos como Miguel Samamé, José Medina y Carmen
Alegre; conversé un rato con Paolo Vigo y me disculpé por no haber ido a su
muestra reciente en Sala 58. También hablé brevemente con el gran Roberto
Cores, con Julio Garay y con Hugo Salazar (extraordinario artista que expuso en
Enlace hace un año; como curiosidad estoy incluyendo una de sus pinturas en
este post), me dio mucho gusto verlo (no habíamos coincidido en ninguna muestra
desde hacía meses).
Arion, octubre de 2012.
Arion, octubre de 2012.
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